La piel se encuentra expuesta a varios factores externos e internos que influyen
en su salud. Los tratamientos para tener una piel saludable y tersa son diversos.
En este sentido, la combinación de equipos y sustancias dermocosméticas juegan un papel
importante para mantener las condiciones de una piel saludable, sin necesidad de acudir a
procedimientos invasivos. Un hábito de cuidado frecuente es muy importante para conservar el
buen estado de nuestra piel, más aún si éste es acompañado con tratamientos profesionales.
Bajo este contexto, uno de los procesos esenciales es la microdermoabrasión o micropeeling
que es en esencia una exfoliación de la piel.